Y después de tantas lunas y tantos soles descubrí que era tanta mi preocupación por encontrarme... que me perdí en el camino...

Y tu.. ¿Ya me has encontrado?



viernes, 11 de junio de 2010

El poder de unas simples palabras…

Extiendo mis alas mientras miro al horizonte, y confiada a tu presencia me permito volar…

El aire con delicadeza acaricia mi rostro… -desde lo alto las cosas se ven tan pequeñas e insignificantes-, elevo más mi vuelo mientras el paisaje se torna pintoresco, con mariposas y arcoíris, con aromas agradables y tu imagen fusionándose con todo el panorama…

Me acerco a tus labios, esos labios que despiertan en mí un deseo desafiante y que a pesar de las adversidades me hacen sentir cierto desenfreno, mis manos torpemente resbalan por tu piel sintiendo ese nerviosismo pueril mientras mi respiración se agita, dominada por aquella vulnerabilidad y sin darme el tiempo de conectar las palabras al pensamiento mi boca hace alusión a unas cuantas insinuaciones… mis movimientos, mis palabras y mis sentidos son dirigidos por el corazón y aquel éxtasis que provocas en mi… cegada me dejo guiar por aquel momento que disfruto al experimentar; tus labios fríos, tu exquisito aroma juegan con mis sentidos provocando cierta lujuria… me acerco de nuevo a tus labios y te apartas un poco, entonces determinas .- “Vamos, anda despierta… Ya es hora”

Y aquellas palabras cesaron mi vuelo…


Gracias por despertarme a tiempo.

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