Y después de tantas lunas y tantos soles descubrí que era tanta mi preocupación por encontrarme... que me perdí en el camino...

Y tu.. ¿Ya me has encontrado?



viernes, 8 de agosto de 2014

Quiero un cómplice de vida

Yo no quiero un marido opresor, 
ni un amante pretensioso, 
o un hombre para pasar el rato;
no quiero un poeta,
ni tampoco un caballero,
ni príncipe, ni mucho menos rey,
no quiero un hombre adinerado,
ni tampoco posicionado;
no quiero un esclavo,
ni un ser robotizado;
ni tampoco cantante, 
mucho menos famoso;
lo que ansío es algo más llano 
un ser simple y natural 
un compañero de viaje,
que no cargue mucho equipaje;
un cómplice de vida
de esos que no tan fácil se dejan intimidar,
con valor para luchar por sus ideales,
que no tenga agrado en fingir, ni tampoco imitar,
que sea sin vacilar tal cual, 
que no le tema a los errores,
que me vea como su igual,
no quiero títulos, ni comodidades,
sólo que no le huya a la adversidad.

Luna


No hay comentarios:

Publicar un comentario