Sueños clandestinos

Prometo cerrar la puerta para negarle la entrada a la rutina, a la monotonía, a los ojos envidiosos.
No te preocupes, me gustan las sorpresas y para ello he dejado dentro de tus medias, guardadas en tu bolso, una llave de entrada al paraíso que construimos.
Esta noche te espero para resucitar tu cuerpo haz dicho, la realidad es que vagaba en el oscuro y frío limbo.
Tú me haz resucitado del sopor hediondo de la miseria humana.
Con esos artilugios de mujer segura, apasionada y sensual. 
Bastó mirarte y perderme en tu rostro para saber que existe algo más.
Bajo el influjo del poder de tu mirada, esta noche conocerás que el amor que aguardo es tan intenso como éstas letras, tierno como tus respuestas, salvaje como lo primitivo, verdadero como la aceleración de tus latidos al terminar de leerme. 
Esta intimidad es nuestra.

@-}--
Rafa B. Quiroga

RESPUESTA:
Querido mío, 

Está por demás decir que creo en tus promesas,

y que a tu lado me siento protegida, 

la manera en que me tratas y curas mis heridas,

la manera en que me endulzas con tus letras la vida,

es tan único tu cortejo, tu sensualidad y arrojo,

que es imposible no flotar dentro de una burbuja

de éxtasis, de deseos, de pasiones y anhelos.

He tenido un sueño, una llave, una noche de resurrecciones,

dos cuerpos, intensidad, ternura y salvajismo,

almas unidas, una noche eterna productora de sensaciones,

4 manos compositoras del más sublime arte,

2 bocas exploradoras de infinitos universos,

pieles acaloradas, corazones acelerados,

dos entes deseosos de sentir, oler, saborear,

de querer entre los fríos mantos resucitar,  

sumidos en un paraíso por ambos construido.

Querido mío tan bello sueño he tenido, 

que ha sido de lo más triste despertar.

Luna