No existe en mi memoria registro alguno
de esas sensaciones que todo mundo cuenta,
eso que supuestamente se desprende de un
dulce beso, desde sentir que flotas,
que todo alrededor se nubla,
el revuelco de las mariposas en el estómago,
la pérdida por segundos de la noción del tiempo y el espacio,
hasta el sentir profundo éxtasis y deseo,
me imagino que todo depende de la intensidad del
beso y del sentimiento que une a los involucrados.
1ro- El preámbulo de mis besos siempre son igual
deseosa, anonada, el corazón al 100, nervios,
incluso hasta un poco de vértigo.
2do.- me toma de las mejillas, dulcemente de los cabellos,
de la cintura o de donde se pueda,
juntamos lentamente nuestros labios
y 3ro.- nada!!! No pasa absolutamente nada!
un par de dermis unidas que no provocan cambio alguno.
Tratando de sincerarme un poco
me recuerdo algunas veces fingiendo sentir,
ilusionándome en que realmente aquel beso
había logrado hacerme entrar en trance;
cerrando los ojos lentamente esperando que aquel
beso fuera certero y diera en el blanco,
pero nunca paso y jamás me atreví a decirlo
a quienes dulcemente habían besado mis labios.
Comienzo a creer que tengo un problema asintomático,
o alguna falla en el cerebro o
los labios frígidos.... muertos,
dicen que los besos aumentan la oxitócina
la curiosísima “molécula del amor”…
Ahora entiendo la triste realidad,
del porque nunca ha pasado de una simple ilusión.
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